Terminé Las cosas que perdimos en el fuego, arranqué Las Encantadas

 Bien escrito lo de mariana enriquez, inquitante, muy vìvidas descripciones de los lugares locales: Constitución, Corrientes, Mendoza... Un poco adolescente siento el encare. El ùltimo cuento de un feminismo tribunero flojeli. Abusa en varios momentos del final abierto. El mas terrorífico y realista el del Petiso Orejudo, el terror encarnado en un hombre infantil con familia, algo con lo que me podría  llegar a identificar. Somos nuestro peor enemigo potencial. Las Encantadas lindo pero me cuesta concentrarme, no estoy en un buen momento, el malestar es enemigo de la lectura aunque la lectura combate el malestar: Habr{a que hacer el esfuerzo.

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