Maravillosa comedia de Elaine May, misma directora de a heartbreak kid y de la injustament bombead Ishtar. Actúa ella, está divina, y Matthau confirma que es un monstrio. El otor del cambio del personaje sólo terina de ser creible por su actuacion
Tengo la impresión de haber visto esta de niño en el cine, pero no puedo asegurarlo. Un verdadero placer. Me gustaría ver las versiones anteriores. Gran final.