Podcast de Gilbert Gottfried varios

Escuché el de Roger Corman, me despertó interés por ve la película de Ametralladora Kelly, construida a partir d ela idea de que no era tan duro como se creía". La película termina con Ametralladora entregándose a la policía. Todos estaban sorprendidos porque creían que lucharía hasta el fin. "¿Por que te entregaste?", le preguntaron. "Sabía que me iban a matar", contestó. A veces una respuesta obvia, casi de perogrullo, tiene una solidez de roca. El de George Takei muy bueno también, divertida su maledicencia sobre William Shatner y también la revelación de que la gaganta se parece a una vagina. Varias reflexiones interesantes sobre ser gay y ser asiático. Gottfried contó que el actor que hace de maitre en el episodio de Seinfeld del restaurante chino era japonés, y se coacheó para hacer de chino viendo películas de Charlie Chan, dode el protagonista chino era interpretado por un actor blanco. Todas las nociones de la infancia que tenemos de cómo es un chino vienen de una construcción armada por la gente de Hollywood. Nuestros inmigrantes chinos corrigieron un poco la cosa, pero si me dicen "imitá a un chino" me sale el personaje de "La Garra" que aparecía en el superagente 86. El de Robert Wagner un bodrio, no lo terminé, ni siquiera cuando hablaba de su actuación en La Pantera Rosa. Algunas perlas en el de Jamie Farr, buen imitador, decía cosas feas de danny kaye y muy lindas de Red Skelton. Muy muy gracioso el de Chevy Chase, muy ácido y hasta venenoso el tipo, contando chismes de Belushi, de Bill Murray, de Rodney Dangerfield. Gilert volvio a contar la anécdota de ese guionista de Hollywood que invitó a sus colegas a un paseo en diferentes helicópteros en lo que habñia una propstitua que les prcticaba una felación mientras revoloteaban por encima de sus casas, donde estaban sus esposas. Cuando uno de ellos volvió a su casa le preguntó a su mujer cómo habia estado y ella respondió. "Bien, pero hubo un helicóptero dando vueltas arriba de la casa toda la noche". Me pareció gracioso aunque me escandalizó un poquito el nivel de machismo y sobre todo el ingenio para la perversión. Increíblemente gracioso el momento en que Giilbert cantó el tema de Barry Mannilow de "Juego Sucio":